El día 14 de marzo comienzan las clases en la Escuela Soldevila, donde ofrecemos educación y apoyo en todos los ámbitos de su vida a niños y niñas de una zona suburbial de Lima, en Perú, con difíciles condiciones de vida y de elevada pobreza. Por ello, nos sentimos felices y orgullosos de poder comenzar un nuevo curso que abrirá nuevas a oportunidades a estos infantes y sus familias.
Iniciar un nuevo curso es en sí una gran noticia teniendo en cuenta las dificultades que hemos tenido que superar. Pero además os traemos otra muy ilusionante: ¡este curso las clases volverán a ser presenciales! Hemos tenido que trabajar duro para que esté todo a punto tras el anuncio por parte del gobierno de que los alumnos podrán regresar a las aulas y dejar atrás la formación a distancia virtual. Pero ya todo está a puntos para que nuestros alumnos vuelvan a la escuela a disfrutar de este espacio que es tanto para ellos, no solo por su educación… es refugio, es apoyo, es autoestima, es jugar, es soñar… Todos nos sentimos muy emocionados.
Todo el equipo de trabajo viene preparando muy cuidadosamente cada detalle para que nuestros niños y niñas se reencuentren después de dos largos años alejados de su escuela. Hemos realizado el proceso de matriculaciones y las entrevistas psicológicas para valorar los conocimientos y el estado emocional de nuestros alumnos y alumnas.
También hemos realizado las jornadas de reuniones con las familias, que se vinculan y comprometen con el Proyecto Escuela, ya que sin la colaboración de las familias en el cumplimiento de sus obligaciones y la creación de un entorno y ambiente familiar propicio, es muy difícil que los niños mantengan una estabilidad en sus estudios y crecimiento personal.
Y ya está dispuesto todo el nuevo material escolar, los uniformes, los nuevos pupitres y otros mobiliarios, la señalética y protocolos para garantizar la seguridad por covid, la adecuación de las aulas y la sala de atención psicológica…
